En venta los terrenos, bienes y activos del Club Deportivo Parayas de Maliaño

Cerca de cumplir el medio siglo de vida, el 'Club Deportivo Parayas' de Maliaño está en venta, tras proponerlo el administrador concursal Amalio Gómez al Juez, y tras un proceso en el que las deudas de la sociedad matriz, la Inmobiliaria Parayas, y las del propio Club, de unos dos millones de euros, han terminado por convertir en estéril el proyecto de reflotación emprendido por la administración concursal una vez que el Club entrara en liquidación en marzo de 2017.

La Inmobiliaria arrastra una deuda cercana a los dos millones, de los que 1,3 son con el Banco Santander, actual propietario del Popular, entidad con la que se contrajeron en origen las obligaciones económicas. Hacienda y la Seguridad Social son, por volumen, otros acreedores significativos.

El 15 de septiembre concluye el plazo propuesto para un plan de venta que incluye en un mismo paquete los bienes, derechos y activos de ambas sociedades (Club e Inmobiliaria). Un plazo que, por cierto, se abría el pasado 15 de julio. Parece ser que varios grupos se han interesado (atraídos sobre todo por su principal activo, que son las instalaciones deportivas) pero -de momento- sin ofertas en firme.

Si concluido ese plazo no se formalizara la venta, se entraría en otra fase en la que la misma podría oficializarse de forma fragmentada, por lotes y con precios de puja que en ese caso podrían llegar a ser realmente bajos al final del proceso. La continuidad de la actividad tampoco está garantizada.

El que fuera 'buque insignia' entre los clubes deportivos de la región, nacido en 1969 y emplazado en un magnífico entorno de 10 hectáreas en el alto Maliaño próximo al Parque de la Punta Parayas, con una superficie construida de 20.397 metros cuadrados, está a punto de concluir oficialmente su 'ciclo vital', tal y como lo han conocido muchos vecinos y vecinas del municipio.

Las deudas y la dificultad para generar otros recursos propios que no vinieran exclusivamente de las cuotas de unos socios que lo han ido abandonando paulatinamente (490 tenía cuando entró en liquidación, y más de 1000 en los 'buenos tiempos') han terminado por dictar sentencia.

El administrador concursal ha valorado todo en 2.7 millones, cifra muy inferior a los cerca de 10 que apuntaba la valoración de la sociedad patrimonial que terminó por solicitar la liquidación en marzo del año pasado.

Además de instalaciones técnicas y deportivas, maquinaria, mobiliario (valorado todo ello en poco más de un millón) el Club cuenta también con una concesión administrativa de terrenos, de dominio público marítimo, para guarda de embarcaciones y rampa, cuyo valor estimado es de 300.000 euros.